La complejidad en la trama de Penny Dreadful viene establecida por la historia personal de sus protagonistas. Para quienes no seáis asiduos o conocedores de esta serie de Showtime, así a modo resumen, digamos que se trata de un drama psicosexual protagonizado por los monstruos de la literatura clásica y que toma como base la historia de Drácula de Bram Stocker. Pero no os preocupéis porque de la trama hablaremos pronto en otro post.
Pese a que cada monstruo tiene a su propio creador, a diferencia de lo que pasa con el Universo Marvel, digamos que su personalidad, quien da forma y vida a su historia, pasado y presente, de una forma u otra también es padre de estas criaturas. Y esa figura paterna es la del guionista y dramaturgo John Logan, quien deja en cada uno de sus vástagos parte de su esencia más personal, dejando reflejada la marginación social de seres que no encajan y son fieles a sus propios principios e ideales.
La esencia de John Logan en los personajes
Presentar a John Logan es necesario, quienes conozcan su estela estarán de acuerdo conmigo, porque la gran mayoría – en la cual me incluyo – recordamos nombres de actores, directoras, etc ¿y qué pasa con los guionistas? Ellos son el cerebro que se esconde detrás de cada creación audiovisual que visualizamos, y apenas los tenemos en cuenta. Pues para quien no conozca a Logan, con este pequeño resumen de su trabajo como guionista, va a descubrir la magnitud de su talento: Gladiator, Skyfall, Sweeny Todd el diabólico barbero de la calle Fleet, El último Samurai o Skyfall entre otras.
¿Qué os parece? Es brutal. Si además nos paramos a observar las características de sus creaciones, de sus vástagos, todos siguen un patrón similar: de una forma u otra sufren una caída “a los infiernos” que los lleva a enfrentarse a una sociedad contraria a ellos y a sus valores; constantemente vuelven a su pasado, como si este fuese ese fantasma que no deja de perseguirlos. Este arquetipo de personaje es similar al que podemos encontrar en cualquier película del Oeste, pero en cualquier caso, todos ellos o la mayoría, tratan de luchar por tener su propia identidad, característica heredada del propio Logan.
En Penny Dreadful va más allá y se refleja a sí mismo en cada uno de los personajes que conforman la historia. Trata de mostrar cómo se ha sentido él al enfrentar la sociedad por su condición sexual, que aunque esto en sí no es importante, en este caso lo es por la influencia que tiene en sus vástagos, que son incapaces de encajar: la señorita Ives, Chandler, etc.
El alma de los protagonistas
Pese a que contamos con unos siete u ocho personajes principales, una de las características de las que presume Penny Dreadful, no os engañéis porque dos son las figuras que destacan inevitablemente por encima de los demás: Vanessa Ives interpretada por Eva Green y Ethan Chandler a quien da vida Josh Harnett. Pero si hay una autentica protagonista de este drama victoriano, cosa que quizás no tenemos claro hasta la segunda temporada, esa es la señorita Ives.
No obstante quiero acercaros un poco más a cada uno de los protagonistas, sin hacer spoilers que vayan más allá de la primera temporada. Por ello, de una forma breve repasamos cuál es su función en la serie, aunque lamentablemente, como es en el caso de Dorian Gray o Brona Croft, el hecho de que Penny Dreadful terminara en su tercera temporada, deja el desarrollo de estos personajes a medias. Prácticamente los deja caer en el olvido en el mejor momento, pero que no cunda el pánico, ya que para aquellos que quieran saber cómo sigue la cosa, la historia continúa en una novela gráfica del mismo nombre que la serie. No me enrollo más y os dejo sucumbir a los placeres de los protagonistas:
Vanessa Ives – Eva Green
La señorita Vanessa Ives, a la que podemos considerar la principal protagonista de la serie, es una poderosa médium y clarividente en cuyos ojos se puede ver el tormento que lleva consigo. Junto a Sir Malcom trata de encontrar a la hija de este, Mina Murray, quien era amiga suya desde la infancia. Vanessa se sirve de sus dones paranormales para ayudar en la búsqueda de Mina, pero como bien decía el tio Ben “un gran poder conlleva una gran responsabilidad”, por lo que sus poderes pueden volverse en su contra.
Probablemente el personaje de Vanessa Ives sea el más complejo de todos, el más atormentado, pese a que ella también debe luchar con el monstruo que la oprime desde dentro. A lo largo de las tres temporadas vamos viendo cómo evoluciona y ha evolucionado desde su niñez hasta el momento actual en el que se encuentra. Y no hay duda de que es el personaje que ha pasado por peores momentos y vivido situaciones límite, pero ver la entereza con la que sigue adelante, es realmente increíble, y que Eva sea capaz de transmitirlo a través de la pantalla es digno de admiración… tiene que ser un gustazo rodar con ella y verla en plena acción en directo.
Es indiscutible que te atrapa, cuando la señorita Ives hace acto de presencia, la escena queda en un segundo plano para ser ella quien capte toda la atención. Un personaje complejo, envuelto en un halo de misterio con difíciles matices al que sólo Eva Green podía dar vida de una manera tan simplemente perfecta. Su forma de moverse, hablar sin apenas cambiar las facciones de su rostro o mostrar ningún tipo de sentimiento, permanecer estática. Su voz.
Ethan Chandler – Josh Hartnett
Pese a que en Penny Dradful hay varios protagonistas principales, sin duda el señor Chandler es el coprotagonista de la historia, el personaje con mayor peso de la trama por detrás de Vanessa Ives. Ya desde el capítulo piloto de la serie se puede apreciar tranquilamente que esconde un secreto, y que su trabajo de “showman” le permite huir constantemente de “algo” que iremos descubriendo a lo largo de cada capítulo. Ethan Chandler es un pistolero americano que viaja a Europa para alejarse de su padre biológico y… hasta aquí puedo leer porque decir más es hacer spoiler para quien no haya visto la serie.
A diferencia de la señorita Ives, a él no le envuelve un halo de misterio, más bien de culpabilidad, como si le rodease constantemente una atmósfera densa que puede percibirse cada vez que entra en escena. Pero de una forma u otra, quizás por su interpretación o cualquier otro factor, se le ve reflejado que en el fondo es humilde, de buen corazón, leal hasta el final, y que vive en una constante lucha con su monstruo interior.
Sir Malcom Murray – Timothy Dalton
Timothy Dalton, quien se metió en la piel de James Bond de 1986 a 1993 antes de que Pierce Brosnan cogiese el relevo, da vida a Sir Malcom Murray. Un explorador de África que apenas ha pasado tiempo en casa, ya que su profesión le ha mantenido alejado de su familia hasta el punto de desestructurarse por completo. Algo que no se ha llegado a perdonar jamás, ya que en parte considera que es una de las razones por las que ha desaparecido su hija Mina. Para tratar de redimirse, en la desesperada búsqueda de su hija, reúne a un grupo de personas con cualidades extraordinarias con quienes luchará mano a mano contra las fuerzas del mal.
Sir Malcom Murray es un caballero londinense de la época, su vestimenta, educación y forma de hablar están muy cuidadas, y es que de casta la viene al galgo, ya que cualquiera no interpreta a James Bond – y no olvidemos que es un caballero inglés que siempre va o iba con el traje impecable en cada misión. Se percibe la dureza de este personaje en su mirada, desafiante, curtida en la sabana africana. De hecho, junto con Vanessa, es uno de los protagonistas con más fuerza en escena.
Victor Frankenstein – Harry Treadaway
Extraño, torturado e incluso ermitaño, serían las tres palabras con las que definiría a Victor Frankenstein, interpretado por Harry Treadaway. Victor es un doctor especializado en el campo de las autopsias que, en su tiempo libre, se dedica a hacer experimentos que van contra la ley, ya que lo que busca con ansía es cruzar la fina línea que separa la muerte de la vida. Esa peculiaridad que desprende, de persona complicada de tratar por no decir “bicho raro”, es lo que hace que Sir Murray lo contrate para investigar a los seres con los que se enfrentan.
Al igual que sucede con el resto del elenco principal, el personaje de Victor Frankenstein está conformado por ciertos matices que pueden ser complicados de transmitir al espectador. Pero Treadaway consigue hacer que sientas cierta repulsión por el bueno doctor, mientras que en otras ocasiones, cuando ves el mal que le atormenta, la compasión te invade y te sientes un poco más cercano a él. Es como una montaña rusa de sentimientos o sensaciones, tan pronto te cae mal como no.
John Clare (la criatura) – Rory Kinnear
Lo llaman la criatura, y pese a que dista mucho del original que todos tenemos en mente, es el monstruo de Frankenstein. Pero este no está constituido en su totalidad por distintas partes y extremidades de otros cadáveres, sino que es simplemente la resurrección del que fue una persona para acabar siendo un monstruo. Una criatura llena de rencor, odio y maldad que lo que busca de forma insistente e incansable es que su creador, al que llama padre, le cree una compañera como él que sea capaz de amarle. Al fin y al cabo quiere lo mismo que los demás, una persona que sepa amar todas sus imperfecciones y que le acepte tal y cómo es.
Caracterizado como la criatura, Rory Kinnear se esconde tras bambalinas del teatro Gran Guiñol. Pese a que de una forma u otra está relacionado constantemente con el resto del elenco principal, su historia se desarrolla de forma paralela. Tiene su función, como el resto de los personajes, pero da la sensación de que si se suprimiese, la historia podría desarrollarse igualmente, sin sufrir grandes variaciones.
Pese a que tratan de mostrar a la criatura como un ser repulsivo, por su comportamiento y especialmente sus constantes enfrentamientos con Victor Frankenstein, es inevitable sentir compasión por él, darse cuenta de hasta qué extremo llega su necesidad de recibir amor aunque parezca un ser distante y frio. Rory borda con éxito su papel, no hay duda.
Dorian Gray – Reeve Carney
Quien conoce la historia del siempre eterno e inmortal, ya se puede imaginar a lo que va a atenerse con Dorian Grey en Penny Dreadful: desenfreno, orgías, etc. Está clarísimo que no podía faltar, cuando de monstruos clásicos se trata, pero pasa algo parecido que con el papel de la Criatura, sólo que la historia paralela que desarrolla Gray tiene una función interesante pero que se queda a medias… eso sí es el eterno enamorado de Vanessa Ives.
Para la elección de Reeve Carney fue elegido casi a dedo, de hecho a John Logan le encantaba su estilo, su excentricidad hasta el punto que le pidió que adaptara a él el personaje, que lo hiciese totalmente suyo. Y la verdad es que le damos el visto bueno, especialmente por la evolución que experimenta a lo largo de cada temporada.
Brona Croft – Billie Piper
Probablemente este sea el personaje que experimenta la mayor evolución en comparación con los demás. En la primera temporada Brona es una prostituta irlandesa que ha llegado a Londres escapando de su pasado y enferma de tuberculosis. En los muelles conoce a Ethan Chandler, y lo que empezó como una relación de amigos con derecho a roce, terminó en una bonita relación de amor con un final trágico. De hecho la personalidad del personaje interpretado por Billie Piper viene determinado hasta por el nombre, ya que el significado gaélico de Brona es tristeza.
Y cuando más finalizado pensábamos que estaba el papel de Brona Croft en Penny Dreadful, vuelve con más fuerza y jugando un importante papel dentro de la trama, pero eso sí, en paralelo. Hay un antes y un después, resurgiendo como el ave fénix e interpretando un papel feminista, puesto que Brona en su regreso, rebautizada como Lily, trata de poner fin a las vejaciones que sufren las mujeres a manos de los hombres. ¡Que comience el cambio sangriento!