La diseñadora de vestuario encargada de diseñar y crear el vestuario que luce Margot Robbie en Barbie fue Jacqueline Durran (The Batman, Spencer o La Bella y la Bestia), con la que ya había trabajado la cineasta Greta Gerwig en el largometraje de Mujercitas. Dicho trabajo le valió a la diseñadora para alzarse con el Óscar a Mejor Diseño de Vestuario, por lo que Gerwig contó de nuevo con ella para dar vida a la icónica muñeca y su singular mundo, Barbieland.
Pero con Barbie la cosa era diferente, sobre todo en la forma de abordar al personaje, ya que a diferencia de sus trabajos anteriores el vestuario de Barbie no nace de su interior, sino que depende de a dónde va o lo que va a hacer. A lo ya mencionado había que añadirle que Barbie siempre lleva un lote completo de vestuario, por lo que si va a esquiar irá equipada con: su traje de esquiar, las gafas, el casco, los esquís, las botas de nieve, los patines de hielo, la bufanda y la botella de agua, entre otros complementos o prendas.
Comenzando por los archivos de Mattel

Así pues, Jacqueline Durran comenzó su trabajo de investigación en Mattel, revisando sus archivos históricos para tener una buena base sobre la que crear sus diseños, tratando de seguir en la mayoría de ellos la tendencia Barbiecore que tan popular se ha vuelto a raíz del estreno de la película. Tanto Durran como Gerwig tenían claro que Barbieland debía ser un “entorno controlado”, por lo que la diseñadora creó una paleta cromática de 15 tonos jugando con el concepto de la Costa Azul en los 60.
El trabajo que se le presentaba a Durran y a su equipo era titánico, ya que no sólo debían vestir a los protagonistas, sino que debían crear los distintos oficios que la muñeca había ejercido a lo largo de los años. Y encontrar un mono rosa de trabajo no era tarea fácil, así como las cajas de herramientas o accesorios, que en muchas ocasiones debían ser “barbificados”. Por si esto fuera poco, cada Barbie de Barbieland debía tener un look diferente de la otra, y todos debían verse lo más perfectos posibles. Pero es que además, si todas acuden a un mismo lugar o evento, Durran se preocupó de que todos sus estilismos estuviesen conjuntados entre sí.
El vestuario de Barbie, un homenaje a su historia

Si por algo se caracteriza Barbie es por su amor por la ropa y la moda, por ello cada vez que la vemos (sobre todo en Barbieland) lleva un conjunto distinto en el que cuida hasta el último detalle. Y si nos fijamos bien en cada uno de los conjuntos de la muñeca, veremos que se tratan de un homenaje que Jacqueline Durran ha querido hacer a la historia y evolución del guardarropa de Barbie, ya empezando por el icónico traje de baño negro y blanco que llevó la muñeca en su lanzamiento de 1959.
El look disco
Para la secuencia de la fiesta que Barbie da en su casa, la diseñadora Jacqueline Durran quiso jugar el contraste rosa de la Dream House de Barbie, así que escogió atuendos en color oro y blanco. La Barbie de Margot Robbie lleva un mono dorado de estilo disco adornado con lentejuelas, mientras que los Ken llevan monos jogger confeccionados a partir de monos retro de los 60 y principios de los 70.
Salimos a patinar
El estilismo de patinaje que Barbie y Ken llevan cuando llegan al mundo real, es un homenaje a la Hot Skatin’ Barbie de 1994, aunque Durran hizo algunos cambios en el diseño final. Mantuvo el estampado original que se incluyó en el look de Ken, así como también replicó los vistosos patines que por cierto están a la venta gracias a la colaboración de la marca Impala y Barbie.
Un rosado Salvaje Oeste
Tratando de pasar más inadvertidos, Barbie y Ken deciden cambiarse de ropa optando por un look más “americano” que evoca el Salvaje Oeste. Este se ha convertido en uno de los looks más icónicos de la película, si no en el que más, pero componerlo no fue tarea fácil para Durran y su equipo, ya que les costó encontrar el rosa perfecto, decidir si el pantalón llevaría cinturilla o no, entre otras cosas.
La colaboración de Chanel
Muchas de las prendas y accesorios que lleva Barbie en la película pertenecen a la firma Chanel, que se involucró en la película desde el primer momento. La diseñadora Jacqueline Durran pudo visitar el archivo Patrimoine de Chanel en París para hacer una selección de toda la ropa y los accesorios que llevaría el Personaje de Margot Robbie. Allí descubrió la colección de Barbie que Karl Lagerfeld había diseñado para la firma francesa en 1995, de la cuál tomó algunas piezas como el traje de Claudia Schiffer “Barbie imaginada por Karl Lagerfeld”.

Encontramos también un total look de Chanel en la película, que va desde los pendientes de aro, pasando por el vestido rosa hasta los zapatos, destacando el bolso rosa con forma de corazón y el logo de Chanel. Pero sin duda, Durran destaca el gran favor que les hizo la firma ya que, pese a que no confeccionan ropa masculina, crearon el traje de esquí a conjunto de Ken para la secuencia en la que él y Barbie están viajando al mundo real.
El vestido amarillo de Barbie

Como sucede en la gran mayoría de las películas, el protagonista experimenta un cambio o evolución que queda reflejado en su vestuario. En el caso de Barbie conforme se va volviendo más humana, tanto su atuendo como los colores de esté dejan atrás el estilismo visto en Barbieland. Tal y como os había comentado antes, durante el rastreo que llevó a cabo Durran por los archivos históricos de Mattel, preguntó cuál era el traje más icónico de la muñeca de los últimos 5 años, a lo que respondieron que era un vestido amarillo.
Y ese era el vestido con el que se iba a marcar el antes y el después de la muñeca, que dejaba atrás su vida para ser humana. Durran tomó la idea del vestido amarillo, pero reconstruyéndolo, le dio un corte drapeado y optó por un amarillo suave que era mucho menos llamativo. En cuanto al calzado que acompaña al vestido, se dejaron atrás los zapatos de salón y se le dieron unas cuñas para mantener el tacón.
Las Birkenstock de Barbie

Terminamos de hablar del vestuario de Barbie haciendo una mención especial a las sandalias Birkenstock que aparecen en la película. Ya que incluirlas tanto en el vestuario como en la propia trama fue idea de Greta Gerwig, la cineasta quería el calzado perfecto que sirviera de contraste al tacón de aguja al que acostumbra a llevar Barbie.
Sin duda una jugada maestra por parte de la directora, ya que la marca de calzado cuenta con el sello de aprobación de la Asociación Médica Estadounidense de Podología, gracias al diseño de sus plantillas fabricadas con corcho y látex. Por lo que todavía tiene un mayor significado cuando al final de la película Barbie, ahora Barbará, lleva unas Birkenstock rosa palo para completar su outfit en el mundo real.
Sin olvidarnos de Ken
El personaje de Ken se presenta en la película como un complemento más de Barbie, ya que sin ella no sería nada. La función del “muñeco” se resume en ir a la playa, por lo que Durran quiso vasar sus looks en la ropa deportiva de los 80 combinados con bañadores elásticos y discotequeros. En cuanto a la ropa interior que luce el personaje, que es de la marca ficticia Ken, fue una idea del propio Ryan Gosling.

Aunque el personaje no tenía ni la mitad de atuendos de los que tiene Barbie, siempre que lo vemos aparecer en escena va conjuntado con la muñeca. Pero la cosa cambia una vez ha ido al mundo real y descubre que es un lugar gobernado por hombres… Ken regresa a Barbieland totalmente corrompido, lo que queda reflejado en su nuevo atuendo: el chaleco de cuero negro con hombreas y flecos, el collar con la herradura y el caballo, la bandana en la cabeza con motivos de relámpagos…

Destaca también el abrigo de piel sintético de Ken, que la diseñadora Jacqueline Durran creó inspirándose en el que luce Sylvester Stallone en Rocky. En el forro interior del abrigo añadieron unos estampados de caballos, para mostrar el amor que tiene el personaje por estos animales.
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