Apenas tres días después del estreno de Harry Potter y la Piedra Filosofal, y sin saber todavía si sería un éxito o un fracaso, comenzó el rodaje de su secuela, Harry Potter y la Cámara de los Secretos, que se estrenó un año después del lanzamiento de su antecesora. El largometraje, en cuya producción se invirtieron 100 millones de dólares, recaudó más de 800 millones de dólares pero sin llegar a alcanzar los 1000 millones que consiguió su antecesora. Cifras aparte, algo que podría decir que para cualquier fan de Harry Potter y su universo mágico no tiene gran importancia, nos encontramos con una película que tenía un tono más oscuro que La Piedra Filosofal. Y que además nos presentaba nuevas pruebas y enemigos a los que debía enfrentarse el joven mago.
En este post iremos un poco más allá y nos centraremos en las curiosidades del rodaje de Harry Potter y la Cámara de los Secretos. Así que en las próximas líneas os contaré la aportación que hicieron algunos actores a sus personajes, cuál fue el decorado más caro de fabricar, así como la experiencia de Rupert Grint (Ron Weasly) al rodar la escena del hechizo tragababosas entre otras muchas curiosidades más. Seguramente los más fans de la saga ya conoceréis lo que voy a contar, igualmente poneos cómodos ¡Lumus!
1. Unas líneas improvisadas

Si hay algo que da naturalidad a la trama, y muchas veces es un acierto, es la improvisación de los actores en algunas escenas. En Harry Potter y la Cámara Secreta tenemos un buen par de ejemplos: cuando Harry y Ron están en la sala común de Slytherin con Malfoy mientras se hacen pasar por Crabbe y Goyle, la frase que Malfoy le suelta a Goyle “No sabía que supieras leer”, fue totalmente improvisada por Tom Felton, porque este había olvidado su frase. Otras líneas que también fueron improvisadas, y que además son épicas, fue el diálogo final entre Lucius Malfoy y Harry Potter: “Bueno, esperemos que el Sr. Potter esté aquí para salvar el mundo”, “Tranquilo, estaré”.
2. El coche volador de los Weasley

Las escenas con el coche volador en esta segunda entrega, a mi parecer, fueron momentazos, sobre todo cuando chocan con el sauce boxeador. El Ford Anglia azul de los Wasley es difícil de olvidar, especialmente difícil para la autora de los libros J.K. Rowling. Y es que este era el mismo coche en el que la autora y su mejor amiga de la infancia, solían pasear cuando eran jóvenes. Se destruyeron catorce Ford Anglias para crear la escena en la que Harry y Ron chocan contra el sauce boxeador.
3. Al estilo Lucius Malfoy

El estilismo que luce el personaje de Lucius Malfoy en la película y, por tanto, a lo largo de toda la saga de Harry Potter, fue idea del actor que lo interpreta, Jason Isaacs. Pensó que sería más apropiado que luciera una melena rubia y larga (para que lo distinguieran de Draco), a la par de que fuese acompañado de un bastón en el que escondería su varita mágica. Para evitar que le cayesen algunos mechones sobre la cara, Jason Isaacs mantenía constantemente la cabeza inclinada hacia atrás, lo que acentuaba todavía más el esnobismo del personaje, dando la sensación de que miraba con desprecio a todo aquel con el que se cruzaba. Fijaos todo lo que le aportó a Lucius Malfoy, y eso que en un principio no quería interpretarlo, ya que creía que era similar a su papel de Capitán Garfio en el largometraje de Peter Pan de (2003).
4. El collar de ópalo

Al poco de empezar la película, concretamente en el minuto 15:40, tras la llegada de Harry Potter a la tienda Borgin y Burkes del callejón Knockturn, podemos ver que entre los espeluznantes objetos que se muestran en las vitrinas hay un collar muy peculiar. Da la casualidad de que parece tratase del collar de ópalo que posteriormente aparecerá en Harry Potter y el Príncipe Mestizo.
5. Hechizo tragababosas

Una de las escenas más complicadas que tuvo que rodar Rupert Grint, aparte de las relacionadas con las arañas, fue la del hechizo tragababosas. Según el propio actor fue la escena más desafiante para él, ya que consideraba que vomitar babosas era algo bastante difícil. Las babosas que tenía que llevar en la boca eran de plástico, pero estaban cargadas de sabores, las había de limón, naranja, menta, chocolate, etc. Pese a todo parece que el actor disfrutó rodando la escena.
6. La aracnofobia de Rupert

Y ya que estamos hablando de Rupert Grint, hay que comentar que sufre de una severa aracnofóbia tal y como también le sucede a su personaje, Ron Weasley. Por ello, las caras que vemos que pone Ron durante toda la escena con Aragog y la posterior con sus hijos e hijas, eran totalmente reales. Ya de por sí el pobre Rupert estaba aterrorizado solo con pensar las secuencias con arañas que iba a tener que filmar.
7. La estudiante de mayor edad

Suele pasar que hay actores que son más mayores que el personaje al que interpretan, a veces incluso demasiado mayores pero parece que no nos damos cuenta. Un claro ejemplo es el de la actriz Shirley Henderson, quien interpreta al personaje de Myrtle la llorona, pues por aquel entonces Shirley tenía nada más y nada menos que 37 años. Lo que la convierte en la “estudiante” de más edad de Hogwarts.
8. Alumnos petrificados

A lo largo de Harry Potter y la Cámara Secreta podemos ver en escena a un par de alumnos petrificados, entre ellos a Hermione Granger, aunque no aparecen todos los que sufren esta suerte. Esto puede deberse, además de para acortar el tiempo de duración de la película, a que el equipo de producción fabricó modelos a tamaño real de los personajes que sufrían la petrificación, de esta manera sustituían a los actores.
9. Un abrazo embarazoso

Cuando Hermione se recupera de la petrificación y vuelve a encontrarse con sus amigos, vemos que va corriendo a abrazar a Harry, pero cuando llega el turno de Ron sólo le da la mano como si fuera para ella un tanto embarazoso abrazarle. Inicialmente Hermione iba a abrazar a los dos pero a Emma Watson le resultaba vergonzoso tener que abrazarles delante de todo el mundo. Por ello el director, Chris Columbus le dejó que solo abrazase a Daniel y estrechara la mano de Rupert.
10. Adiós Dumbledore

Lamentablemente el actor Richard Harris, que había dado vida al profesor Albus Dumbledore también en Harry Potter y la Piedra Filosofal, murió apenas unas semanas antes de que se estrenase la película.
11. Dando vida al Fénix

Quién podría olvidar al maravilloso Fawkes, el ave Fénix que sigue tan fielmente al profesor Albus Dumbledore. Resulta que el fénix era animatrónico pero lo había fabricado de una forma muy realista, hasta el punto de que el propio Richard Harris cuando lo vio por primera vez llegó a penar que era un ave fénix viviente real. La verdad es que a la hora de crear a los diferentes animales fantásticos que aparecen en la película cuidaron hasta el más mínimo detalle, sólo hay que echar un vistazo al asilisco y a la araña Aragog.
12. La voz del basilisco

En la versión original de Harry Potter y la Cámara Secreta el actor que proporciona la voz al basilisco es el mismísimo Jason Isaacs, nuestro Lucius Malfoy. Esto fue cosa de Chris Columbus, que conociendo el gran trabajo de doblaje y voz en off que hacía Isaacs, le pidió que crease una voz espeluznante para el basilisco.
13. Avada kedavra

Después de liberar a Dobby por error, Lucius Malfoy trata de maldecir a Harry Potter. Antes de que el elfo lo detenga podemos escuchar como Malfoy comienza a recitar la maldición imperdonable de Avada Kedavra. El propio Jason Isaacs explicó en diferentes entrevistas que en ese momento acababa de leerse el cuarto libro, por lo que era la única maldición que podía recordar en ese momento.
14. El Set más caro

La oficina de Dumbledore debía ser lo más elaborada posible, con enormes columnas de piedra, librerías, mesas llenas de diferentes objetos, pinturas en las paredes, una silla con forma de trono, un telescopio gigante y mucho más. Por lo que resultó ser el set más caro de todos de construir, en un principio ya avisaron a Chris Columbus y al diseñador de producción Stuart Craig de que el diseño que habían propuesto sería demasiado caro. De todas formas pudieron conseguir los fondos necesarios para su construcción.
15. Un guiño a Star Wars

Una de las escenas épicas de Harry Potter y la Cámara Secreta es el duelo entre Harry y Draco por atrapar la Snitch Dorada. Pues durante el partido de Quidditch, parte de la música utilizada durante la escena es la mima que suena durante la persecución del speeder en Star Wars: Episodio II – El ataque de los clones (2002).
16. Pequeñas heridas

Los que tampoco salieron muy bien parados durante el rodaje de la Cámara Secreta fueron los actores Jamie Waylett y Josh Herdman que interpretan a Crabbe y Goyle. Y es que cuando filmaban la escena en la que se comían los cupcakes flotantes, ambos actores se hicieron cortes en la boca con los ganchos que sostenían los pastelitos al hilo de pescar.
17. Escena Post Créditos

¿Alguna vez habéis visto la película de Harry Potter y la Cámara Secreta hasta que terminan los créditos finales? Pues deberíais porque resulta que hay una escena pos créditos, esta nos traslada de nuevo hasta el Callejón Diagon, concretamente hasta la librería Flourish y Blotts. En el escaparate vemos que Gilderoy Lockhart ha escrito un nuevo libro titulado ¿Quién soy yo?
18. escenas eliminadas

Hay muchas escenas que se cortaron del metraje final que podemos encontrar en el contenido extra del DVD o Blu-ray. En total hay unas 19 escenas que ayudan a que la trama sea todavía más fiel al libro. ¿Las habéis visto todas?